Varias profesiones sufrirán cambios en un futuro próximo gracias a la evolución de la IA, y el área de HR debe escapar de ello.
Cada vez que surge una nueva herramienta de inteligencia artificial (IA), surgen también nuevos debates e inquietudes en distintos ámbitos profesionales. Mucho se habla de las consecuencias directas que estas herramientas tendrán en el trabajo de programadores, diseñadores y redactores en un futuro muy cercano. Pero, ¿sabemos cómo afectarán a los recursos humanos?
Si bien algunos profesionales temen que la IA pueda reemplazar su trabajo por completo, otros ya empiezan a ver las ventajas de usarla para su beneficio. Según un estudio reciente realizado en Estados Unidos por la plataforma Eightfold AI, las herramientas de IA se han vuelto tan comunes en la rutina profesional que el 92% de los líderes de recursos humanos ya planean aumentar su uso en al menos un área.
Pronto será inevitable que los equipos de recursos humanos utilicen la IA en las decisiones de contratación a diario. Y con base en la experiencia que ha tenido el mundo con la evolución tecnológica en las últimas décadas, ya se sabe que quienes le temen terminan quedándose atrás. En medio de tantas dudas e incertidumbres, hay solo una certeza: ignorar por completo la inteligencia artificial y su capacidad de producir no traerá beneficios a nadie.
El uso de la inteligencia artificial en HR
La mayoría de los profesionales de recursos humanos han recurrido al menos una vez a las herramientas de inteligencia artificial con un objetivo simple: ahorrar tiempo. Esto se debe a que, si se usan correctamente, pueden ayudar a responder preguntas rápidas, automatizar tareas tediosas y generar información y contenido en cuestión de segundos.
Según el estudio Eightfold AI, algunas de las tareas que los profesionales ya han comenzado a realizar con la ayuda de la IA incluyen la gestión de registros, el procesamiento de la nómina y la administración de beneficios, el reclutamiento y la contratación, la gestión del rendimiento y la incorporación de nuevos empleados.
Y dado que los usos de la IA son prácticamente infinitos, sus beneficios también lo serán. La inteligencia artificial para HR se puede encontrar en diferentes herramientas y adaptarse a las necesidades específicas de cada usuario. Estos podrían ser algunos de ellos:
- Ahorrar tiempo: la IA en recursos humanos puede ahorrar tiempo y, a menudo, frustración, al automatizar tareas tediosas y de gran volumen, como la selección de currículums.
- Simplificar el proceso de contratación: algunas herramientas de IA ayudan a unir los puestos vacantes con los candidatos más adecuados, lo que puede mejorar la calidad de la contratación e incluso conducir a una mejor retención.
- Encontrar información rápidamente: en lugar de buscar y leer páginas y páginas de artículos y documentos, la IA puede responder rápidamente algunas preguntas simples de recursos humanos.
- Mejorar la toma de decisiones: la IA puede ayudar a los equipos de recursos humanos a tomar decisiones sobre la contratación y otras opciones a través del análisis de datos.
Inteligencia artificial, sí, pero con precaución
La IA puede hacer mucho, pero como todo producto tecnológico, debe usarse con precaución en cualquier tipo de proceso por el riesgo de errores que puede generar. Estos riesgos existen porque la IA ha aprendido de los humanos algunos prejuicios que aún no se han superado en el área de HR. Es por eso que algunos países ya comenzaron a imponer restricciones al uso de la IA en los procesos de contratación.
La IA y el futuro de los recursos humanos están indudablemente conectados. Pero hay pocas posibilidades de que la IA reemplace por completo a los profesionales en el campo. No solo por su capacidad de error, que sigue siendo contundente, sino porque para que funcione correctamente es necesario que una persona cualificada asuma el mando y sepa utilizarlo.
El futuro de la IA en recursos humanos cambiará mucho a medida que la IA evolucione y reciba capacidades más avanzadas. Es probable que con el avance de las herramientas de IA sea posible realizar tareas más complejas con un clic durante el proceso de contratación, despido o medición del clima laboral. Por ahora, lo ideal es entender cómo la IA puede ayudar, y tener el discernimiento para rechazar algunas de sus soluciones. Después de todo, el lado humano aún es capaz de tomar las mejores decisiones.
